El Lazarillo de torpes by Miguel Sandín

autor:Miguel Sandín
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Humor
publicado: 2018-09-11T03:00:00+00:00

Cinco horas con varios

A pesar de algunos ligeros contratiempos como el ocurrido en 4.º B, puedo determinar que la mayoría de los alumnos son gente agradable y positiva, como la que puede haber en una empresa y mucho más agradable de la que suele encontrarse en cualquier comunidad de vecinos. Solo que están a medio hacer y empiezo a pensar que lo más difícil de nuestra tarea es encontrar el punto exacto de temperatura para que no se cuezan ni se queden fríos.

Dentro de esa normalidad he detectado, sin embargo, ciertos curiosos tipos humanos que se repiten en casi todas las clases:

1. EL PELOTA: se caracteriza por su sonrisa permanente y su hábitat natural son las primeras filas, que ocupa con diligencia después de saludar en la puerta: «Buenos días, profe». Ríe cada ocurrencia como si fuera lo mejor que ha escuchado en su vida y amplía su espacio de acción a pasillos e incluso al patio, donde es fácil encontrarle a tu lado comentando lo interesante que resultó eso que dijiste ayer. Les veo futuro como banqueros o asesores de algún político autonómico.

2. EL AMARGADO: se caracteriza por su invariable mueca de asco. Eso cuando se logra ver su cara, porque con frecuencia la esconde durmiendo sobre la mesa. Si anuncias un examen responde: «Vaya mierda». Si aseguras que será fácil responde: «Vaya mierda». Cuando comienza la clase saluda: «Vaya mierda», y cuando acaba se despide del mismo modo. Les veo futuro como taxistas o funcionarios (preferentemente de los que atienden al público detrás de un mostrador).

3. LA CUQUI: se caracteriza por llegar tarde todos los días y sin duda la causa es el tiempo que emplea maquillándose en casa frente al espejo. El peinado varía según el modelo de ropa que viste, por supuesto a juego con pendientes y pulseras, y su atención suele estar orientada a descubrir quién está pendiente de ella. Cada vez que la miras te devuelve una sonrisa de carmín muy coqueta. Les veo futuro como agentes inmobiliarias, dependientas de moda o presentadoras del tiempo.

4. EL FUTBOLERO: se caracteriza por su invariable indumentaria que consta de chándal de su equipo, camiseta de su equipo, sudadera de su equipo y un balón entre los pies durante los cambios de clase. Sabe siempre qué equipos han jugado la semana pasada y los partidos de la que viene, recuerda quién es el portero menos goleado, la clasificación de primera y segunda división al completo (también las de Inglaterra o Italia). Además conoce al dedillo la historia de su club aunque no sepa quiénes fueron los Reyes Católicos. Les veo futuro como peluqueros, camareros o presidentes de Gobierno.

5. EL PITAGORÍN: se caracteriza por ser más bajito y más silencioso que la media, por su letra esmerada y porque apunta todo lo que se dice aunque no sea importante. No interviene demasiado en las clases pero cuando lo hace consigue que todas las cabezas se vuelvan en su dirección tratando de comprender qué demonios ha preguntado. Me gustaría verles

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